Carcinoma de mama que se origina en los conductillos mamarios y que se extiende a lo largo de ellos, sin llegar a romperlos y sin formar tumor. En sentido estricto, no es capaz de producir metástasis a distancia, pero sí puede afectar a zonas muy extensas de la glándula mamaria. Su pronóstico es muy favorable si se extirpa todo el tejido mamario afectado.